Curso de conducción Mammoth

Como entre unas cosas y otras no salgo con la bici desde la última entrada de este blog, hoy voy a intentar narraros una experiencia que tuvimos en Septiembre del año pasado, mis compis bikers Oscar, Dani y yo, asistimos a unos de los cursos de conducción que organiza la gente de Mammoth, a las 8 de la mañana me recogen mis compañeros y tras colocar la bici en la trasera de la furgo de Oscar, partimos hacia Cercedilla, donde se impartía el curso, había tres monitores pero la voz cantante la llevaba Eduardo "Dudu" Cuesta, conocido deportista de Madrid, tanto de Enduro en moto como en bici.

Escuchando atentos la teoría para luego intentar ponerla en práctica.

Una vez que ya estamos todos los bikers nos desplazamos hacia el lugar donde hacemos las primeras pruebas de equilibrio, aquí hago un inciso para comentar que yo estrenaba bici y pedales automáticos, lo cual me ocasionó algun que otro problema (Me caí dos veces). Estos primeros ejercicios consistían en cruzar las manos en el manillar, poner una pierna encima del mismo, ir con un compi abrazados en paralelo y luego un juego que consistía en intenta cortar el paso a otro compañero para hacer que pusiera el pie en tierra. Hay que decir que había dos niveles de curso, iniciación e intermedio, al ir todos juntos podías elegir de cada práctica en concreto si hacer la de un nivel o el otro, esto fue importante para mí, ya que creo que estaba en un nivel entre medias de los dos y algunas prácticas del intermedio eran bastante fuertes para mí y opté por realizar las del iniciación.

A continuación nos enseñaron las postura adecuada para subir sin perder tracción en ninguna de las dos ruedas, la importancia de la cadencia, sortear obstaculos en plena subida, asi como la técnica adecuada para cambiar de velocidad cuando estamos subiendo.

Después nos desplazamos a otro punto de la ruta, que dicho sea de paso, transcurría por un marco incomparable de pinos, donde hablamos de la importancia de elegir bien la trazada a la hora de atacar raices, piedras, etc...

Por último fuimos a una pradera a practicar saltos, pusieron unos troncos y teníamos que intentar hacer un BunnyHop sobre ellos.

En definitiva una muy buena mañana en Cercedilla, aprendiendo bastante y pasandolo muy bien en compañia de otros bikers.

 

Bajando a realizar el BunnyHop

Con el amigo Millanes.